miércoles, 24 de agosto de 2016

CONSULTAS NORMALES Y COMUNES LLENAN LAS SALAS DE URGENCIAS





Lamentablemente cada día se hace un uso incorrecto de las salas de urgencias, y eso conlleva a un aumento innecesario del número de casos, provocando colapsos en el servicio. Ejemplo de esto, cuando juega la selección de fútbol de España o algún partido significativo como Real Madrid – FC Barcelona, las urgencias bajan un 40 %. Si fueran reales se mantendría el mismo volumen habitual que cuando no hay partidos.


CONSULTAS NORMALES Y COMUNES LLENAN LAS SALAS DE URGENCIAS...

Por: Dr. Omar G. Guillermo H.
Revista Ávila en Salud




Si hablamos de Urgencias y Emergencias podemos encontrar múltiples conceptos, los hay en carácter sanitario y otros en carácter no sanitario. Independientemente el carácter, todos vienen a concluir en la inmediatez necesaria o existente de una determinada acción.

En el mundo sanitario al decir emergencia hablamos de una situación en que la vida corre peligro, y si decimos urgencia hablamos de una situación en que la vida podría correr peligro, pero con un rigor mucho menor que en las emergencias. El resto de situaciones se denominan consultas. Ejemplos de emergencias pueden ser: accidente de tráfico, caídas significativas, cuadros de asfixias, convulsiones, dolor intenso torácico, perdida del conocimiento, hemorragias, dificultad respiratoria, etc. Ejemplos de urgencias pueden ser: nauseas, vómitos, diarreas, dolor de estómago, malestar general, malestar faríngeo, traumatismo leve o moderado, dolores de moderada intensidad, etc.

En las emergencias y urgencias aparece un síntoma significativo que alerta al paciente o familiar y las mayorías de las veces se presentan repentinamente, necesitando la primera un tratamiento inmediato, mientras que la segunda puede requerir un tratamiento o asistencia dentro de un periodo razonable.

Las mayorías de las veces estas situaciones son vividas por personas no profesionales y carecen de recursos que le permitan definir a que corresponde, si a una urgencia o a una emergencia.
Frente a esas mismas situaciones, los profesionales nos valemos de la técnica del triaje, que sirve para clasificar la existencia de emergencias o urgencias e inclusive otorgar un número clasificatorio que permite organizar por prioridad el orden de la atención.

Lamentablemente cada día se hace un uso incorrecto de las salas de urgencias, y eso conlleva a un aumento innecesario del número de casos, provocando colapsos en el servicio. Ejemplo de esto, cuando juega la selección de fútbol de España o algún partido significativo como Real Madrid – FC Barcelona, las urgencias bajan un 40 %. Si fueran reales se mantendría el mismo volumen habitual que cuando no hay partidos.

Del mismo modo e igual de lamentable o más aún, algunos pacientes hacen uso de las salas de urgencias como si fueran consultas rutinarias, visitas a urgencias que no cumplen ninguno de los criterios antes descritos. Nos ha tocado valorar pacientes, que refieren, que estaban de paso por el parque y como le quedaba cerca la sala de urgencias pasan a consultar un síntoma de más de una semana de evolución y que no es ni emergencia ni urgencias, pero lo complico más, si llega otra persona que si cumple los criterios y le pasamos antes, “ojo, con la técnica del triaje”, el paciente no urgente suele enfadarse, y casi siempre muestra su insatisfacción por las horas de espera, del que, aunque él no sea consciente, pero está contribuyendo a empeorarla…

Recientemente he vivido dos nuevas modalidades de visita a urgencias, que se nos suman, pero no para mejora, sino más bien para seguir en ese continuo mal uso de los recursos que tanto cuestan.
Primera nueva modalidad a la que llamaré bola de cristal: mi hijo se va de viaje, “pero también puede ser”, se va a la universidad, usted puede mirar al niño (20 años), que hace 4 días le molestó la garganta, no sea que le pase algo luego...
Y es por ello que le llamo bola de cristal, como si de magia se tratara, saber o adivinar el futuro incierto de la salud de un paciente, que se presenta a urgencias sin presentar síntomas actuales.
Reconozco la legitimidad e incluso la humanidad de que sus padres o el mismo paciente quieran sentirse más seguros si le valora un médico, pero el lugar para estos casos no es la sala de urgencias.

Segunda nueva modalidad a la que llamaré súper chequeo completo urgente: ¿Qué le pasa al niño? (4-6 años), Bueno doctor, no le vemos nada especifico, pero usted puede hacerle una revisión general que nos vamos de vacaciones…
Y es por ello que le llamo súper chequeo completo urgente, como si la sala de urgencias es para revisar pacientes sanos, tal como haríamos en consultas rutinarias en algún programa de revisión. Es compromiso de su médico realizar chequeos o revisiones generales, absolutamente legítimo pedir revisiones, pero no en sala de urgencias.

Muchos de los que leen estas líneas son mis pacientes, muchos pueden dar fe de la voluntad, disposición y entrega que pongo en cada caso, no se trata de no ver a los pacientes, no se trata de no querer ver a los pacientes, no se trata de rehuir nuestra responsabilidades, se trata de que hagamos un uso responsable y correcto de las salas de urgencias. Entre todos debemos contribuir con el sistema sanitario. No hace falta esperar dañarlo y convertirlo en inservible para luego valorarlo y añorar lo bueno que una vez fue.




Artículo publicado en la Revista Ávila en Salud © ‎
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Edita: Servicios de Atención Médica Integral XXI, SL (SAMI XXI).
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El Dr. Omar G. Guillermo Henríquez, es médico especialista en Senología y Patología Mamaria, especialista en Medicina Familiar y Comunitaria, Director de la Revista Ávila en Salud, Director de EMS Spain, CEO SAMI XXI. 

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